ADELANTE, SIEMPRE ADELANTE…

Hoy quiero dedicar esta columna, especialmente, a mis chicos y chicas que tan feliz me han hecho estos días. También se la dedico a Olga y a Don Tomás, fieles lectores de esta columna, seguidores y que me acompañaron en uno de los días más especiales de mi vida. Gracias a todos. Ellos saben quienes son: hago el juego con un cuatro, con una “A”  y con un poeta que espero recuerden, por lo menos a modo de mi presentación el día que les conocí: el gran Rubén Darío. Os quiero decir que se puede aprender y aprender depende de cada uno de vosotros, del trabajo que os toméis, de la constancia y de la permanencia, que al final es lo que vence. Cuando Rubén Darío escribió Azul se atrevió con algo nuevo, diferente…Y atreverse es necesario para poder elegir, para poder continuar y para poder dar  el próximo paso. La vida está constituida de pequeños pasos, pequeños detalles que van haciendo ese caminar que tan sabiamente escribió nuestro amado y querido D. Antonio Machado: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar…”. Cada vez que tengáis una duda acudid a los grandes poetas, tenéis un largo y bello camino por descubrir, por recorrer, por disfrutar. La Generación del 27 es una verdadera joya, escribieron también uno de los grandes capítulos de nuestra Historia de la Literatura y de la Literatura Universal, aprovechadlos, están ahí para vosotros.
Pedro Salinas define la poesía como un ahondamiento en la realidad, «una aventura hacia lo absoluto. Se llega más o menos cerca, se recorre más o menos camino: eso es todo». Reduce a tres los elementos de su creación: «Estimo en la poesía, sobre todo, la autenticidad. Luego, la belleza. Después, el ingenio». Así que os animo y os recomiendo que leáis, que leáis y que no os canséis de leer, el saber está en los libros. Escribe Salinas en La voz a ti debida: “¡Si me llamaras, sí; /si me llamaras! /Lo dejaría todo, /todo lo tiraría: /los precios, los catálogos, /el azul del océano en los mapas, /los días y sus noches, /los telegramas viejos /y un amor. /Tú, que no eres mi amor, /¡si me llamaras! …

Muchas gracias y muchas felicidades a todos por ser como sois.

Artículo publicado en el número 2.184 del Semanario Puerta de Madrid. Alcalá de Henares