Las demencias son los trastornos clínicos más importantes de nuestro tiempo. Afectan sobre todo a la población de la tercera edad y producen una sobrecarga tanto a los propios afectados como a sus familias.
Se trata de un deterioro cognitivo progresivo y generalmente crónico (duración superior a 6 meses) con afectación de varias funciones cognitivas que limita las actividades diarias del usuario y en el que frecuentemente comparten síntomas psicopatológicos.
Podemos dividir las demencias en: Demencias primarias, demencias secundarias y demencias mixtas. Entre las primarias podemos hablar de Alzheimer, Parkinson y Demencia por Cuerpos de Lewy, entre otras. Si hablamos de demencias secundarias la más frecuente de todas es la Demencia Vascular y cuando hablamos de demencias mixtas es cuando coexisten una demencia primaria y una secundaria. Aun así, la forma más frecuente de demencia es el Alzheimer.
La elevada incidencia de las demencias en las últimas décadas ha provocado el interés de la población general, lo que ha llevado en muchas ocasiones a generar mitos y afirmaciones erróneas que se han introducido en nuestro discurso diario y que pueden confundir y asustar a aquellos que no conozcan dichas patologías.
Es importante para el correcto seguimiento del paciente con demencia, que los familiares y/o cuidadores principales tengan en cuenta una serie de pautas. Algunas de ellas son:
– Escuchar las necesidades y la expresión de emociones de nuestro familiar
– Establecer rutinas y proporcionar seguridad
– NO sobreproteger
– Simplificar tareas. No ofrecer muchas opciones
– Prestar atención a señales y cambios en su comportamiento
En definitiva, cada caso es único y por lo tanto, las necesidades de cada persona también lo son. De todo ello se hablará en la charla “Demencia. Mitos e intervención en Centro de Día”.
****************************************