Vitalia Alcalá de Henares ha impartido una charla en la Asociación de Mujeres de Alcalá sobre consejos para que el cuidador pueda gozar de buena salud para cuidar al mayor que pueda tener a su cargo. Con el título “Consejos para cuidar al cuidador”, María José García Delgado y Amanda Hidalgo Pérez, enfermera y terapeuta ocupacional de Vitalia Alcalá de Henares apuntaron, entre otras cuestiones, que es fundamental que el cuidador sienta el apoyo y la comprensión de su entorno familiar y social.
María José García comenzó la charla definiendo el “cuidado informal” como la atención no remunerada que se presta a las personas con algún tipo de dependencia, bien por parte de los miembros de la familia u otros sujetos sin otro lazo de unión ni de obligación con la persona dependiente que no sea el de la amistad o el de la buena vecindad. En los últimos años el cuidado informal de personas mayores dependientes se ha convertido en un tema de especial relevancia, tanto desde un punto de vista social como clínico. Debido esencialmente al envejecimiento de la población y al incremento de enfermedades degenerativas, cada vez hay más cuidadores que ocupan esta posición durante más tiempo. Apuntó también que la mayoría de los cuidadores son familiares y gran parte de las personas dependientes son personas mayores. Evidentemente, la institucionalización de estos mayores dependientes o su cuidado por medio de profesionales de la salud es una posibilidad; sin embargo, en la mayoría de las ocasiones, se requiere de gran parte del cuidado dentro del entorno familiar.
Desde la parte de la terapia ocupacional la terapeuta Amanda Hidalgo impartió distintos consejos para poder cuidar bien son fundamentales:
•Técnicas y habilidades para desarrollar bien su rol de cuidadores, teniendo en cuenta el esfuerzo físico y el desgaste emocional.
•Valorizar la figura del cuidador y su labor.
•Educar al cuidador facilitándole información para ayudarle en su labor diaria.
•Mejorar la calidad de vida de los cuidadores y personas dependientes.
Cuidar a una persona dependiente supone con frecuencia una notable fuente de estrés que puede llegar a afectar, y de hecho afecta, de manera importante a la vida del cuidador.
Además de ver mermado el tiempo libre y las actividades de ocio, de ver restringida su vida social, de tener dificultades en la vida familiar y laboral, en ocasiones puede verse alterada su propia salud; además, contrae una gran carga física y psíquica, se responsabiliza de la vida del enfermo, va perdiendo paulatinamente su independencia y se desatiende a sí mismo. Por esta razón es importante que el cuidador se dedique un tiempo a sí mismo para relacionarse, cuidarse y no comenzar a tener la conocida
“sobre-carga” del cuidador.
Apuntaron que lo fundamental es cuidarse para sentirse mejor y finalizaron la charla con una serie de principios recomendables para los cuidadores:
•Pedir ayuda
•Poner límites
•Saber decir “NO»
•Saber delegar
•Poner freno a las críticas
•Mantener hábitos saludables
•Entender las actuaciones del familiar
•Desahogarse con alguien de confianza
•Organizar su tiempo
•Marcar prioridades
•Ser realista
•Ver lo positivo de las complicaciones