Hay que ver qué cosas tan raras pasan en el cine, digo en el mundo del cine en general porque hay veces que entre las apuestas y los errores hay un hilo tan filo que el resultado puede ser para echarse a correr… Resulta que justo ahora, cuando Penélope Cruz está en lo más alto de su carrera, cuando en esas famosas quinielas era una de las favoritas (según nos han estado contando a bombo y platillo) pues no se lleva el Globo de oro. Ni atisbo.
Gana Kate Winslet, es más ganó dos Globos de oro, uno como Mejor Actriz de Reparto (que fue el que le arrebató a Cruz, premio al que optaba por su papel en Vicky, Cristina, Barcelona) por la película The Reader y un segundo Globo como Mejor Actriz por su actuación en Revolutionary Road. Ya sabemos que en el cine se mueve mucho dinero de taquilla, de publicidad y en fin, Hollywood es Hollywood… Y siendo esta cita la antesala de los Oscars pues…mal pinta para la española, que está estupenda en la última película de Woody Allen, que en su conjunto ha obtenido el aplauso del público en uno de sus trabajos más genuinos y conseguidos.
Por supuesto que de Bardem ya ni hablamos. Ni siquiera se dejó ver. En estas estamos cuando veo que en el cine español pues pasa un tanto de lo mismo. Resulta que la Academia del Cine (que por cierto es una entidad privada y hace y deshace como tal) ha dejado fuera de la competición de los Premios Goya «por un error administrativo» a la película «Mi única familia«, una co-producción hispano-argentina, dirigida por Miguel Menassa y que ha cumplido escrupulosamente todos los trámites para poder estar entre las candidatas del cine español.
Ché, me dicen, ¡qué cosas tan raras pasan en el cine! Y la verdad…pasan estas cosas ¿y no se puede hacer nada? De acuerdo que las candidaturas a los premios son candidaturas pero que por un error de la Academia de cine español se «carguen» literalmente una película del mercado…no se entiende. Algo debe ocurrir con la presidencia de esta academia de cine y español y parece…que por ahí van los tiros.