Me han traído de Cuba dos libros de Dulce María Loynaz, Premio Cervantes y poeta de canto tierno e intimista en una piel de mujer universal; una de las primeras mujeres que fue miembro de la Real Academia de la Lengua, que en Cuba funcionaba en la casa particular de Loynaz. Uno de esos libros se titula Confesiones (Ed. José Martí) y es una entrevista que le hace el periodista y gran amigo de Dulce María, Aldo Martínez Malo. Habla de su vida, de su escritura, de sus hermanos, de Lorca y Juan Ramón Jiménez, dos amigos que visitaron su casa cubana durante muchos años, Lorca, incluso vivió en ella durante algún tiempo. Me gustaría mostrarles todo lo que ella comenta porque es un aprendizaje, pero, hoy, de momento voy a extraer algunos de sus comentarios sobre la poesía y el amor. Sobre la poesía dice: <